Es cierto que el significante “éxito” tiene muchísimas definiciones posibles entre distintos grupos sociales. Abarca desde el poseer excesiva cantidad de dinero hasta el no tener que depender de él. El lingüista ruso Valentín Voloshinov* diría que ninguna palabra es neutral, que es un signo ideológico porque tiene áreas de creación y material ideológicos determinados.
En Caso de éxito, el éxito se disputa significados entre lo “masivo, lucrativo, nos revientan los bolsillos” —para los publicistas— y lo “maloliente, vomitivo, caliente, efervescente” —para la comunicadora que trabaja en la empresa familiar—. Pero lo más interesante es que se termina construyendo una definición determinada por la convergencia entre la realidad práctica-material con la que se cuenta, los alcances posibles en una materialidad definida, y aquello que forma parte de la utopía y el idealismo. El éxito, entonces, conforma todo lo que se encuentra en esa intersección.
Es un musical que reúne las incertidumbres profesionales que genera la carrera de Ciencias de la Comunicación Social con las representaciones de publicistas superficiales y demagogos, y una empresa familiar aquietada. Todo eso con una dosis amplia de humor y voluntades paralelas y contradictorias.
“Seguí la guita sin dudar, no importa si engañas o mentís, porque en tu cabeza está tu fin (…) ser exitoso es posible cuando te resbala todo” (Regla 32 del publicista).
Tanto la performance actoral como vocal están muy bien desplegadas por todo el elenco. El círculo humorístico cierra con cada una de las acciones extraescénicas que se suceden.
Contexto: Funciones los sábados 18.30 h.en El Método Kairós (El Salvador 4530), Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina. Comprá las entradas online.
Carla Bleiz
*En El signo ideológico y la filosofía del lenguaje. Pueden leerlo completo en este link.