El teatro es una combinación de recursos que, cuando se hace explícita, libera una sonoridad distinta a cualquier expresión cultural. Gran parte de esa sonoridad se puede percibir en Esas cosas que se dicen y son tan extrañas, una obra simple, musical, poética, y con citas del libro La balada del café triste, de Carson McCullers.
Como Ring, la obra conceptualiza los vínculos amorosos, pero de un modo distinto: teniendo en cuenta todo el bagaje que traemos antes de conocer a alguien. Por eso la simpleza se complejiza a medida que transcurren los diálogos. Porque el amor casi nunca depende sólo de un otro, sino de nuestras propias experiencias y necesidades emocionales.
Ella se maldice por “desbarrancar por el abismo del amor imposible” y para él escribir hace que “las cosas parezcan otras”. En definitiva, esos son pedacitos de la subjetividad hablante que, aún compartiéndose con otro, florecen más que nunca.
Contexto: Obra que estuvo en Espacio 33 (Treinta y tres Orientales 1119, C.A.B.A).
Carla Bleiz